Cómo seguro que ya sabes, el Impuesto de Sociedades es un tributo que grava los beneficios obtenidos por las empresas y otras entidades jurídicas en un ejercicio fiscal. A mi me gusta llamarlo, el impuesto de la renta de las empresas.
Además para que entiendas que es una deducción y bonificación, te hemos traído algunos ejemplos. Así podrás entender un poco mejor a tu asesor cuando te explique lo que te sale a pagar.
A continuación, abordaremos las distintas deducciones y bonificaciones, cómo aplicarlas y qué gastos son deducibles o no en el Impuesto de Sociedades.
Índice de contenidos
¿Qué son las deducciones y ejemplos?
Las deducciones en el Impuesto de Sociedades son beneficios fiscales que permiten a las empresas reducir su carga impositiva al realizar determinadas actividades o cumplir ciertos requisitos. Para que lo entiendas, la deducciones se restan despues de calcular el beneficio y multiplicarle el 25% del impuesto.
Algunos ejemplos de deducciones fiscales en el IS son:
- Deducción por Investigación, Desarrollo e Innovación Tecnológica (I+D+i): Estas deducciones fomentan la inversión en actividades de I+D+i, permitiendo a las empresas deducir un porcentaje de los gastos realizados en estos proyectos.
- Deducción por creación de empleo: Las empresas pueden deducir un porcentaje de los costes laborales al contratar a ciertos colectivos, como jóvenes desempleados, mujeres o mayores de 45 años.
- Deducción por inversiones en producciones cinematográficas: Este incentivo fiscal se aplica a las inversiones en la producción de películas, series y documentales, y permite deducir un porcentaje de los gastos incurridos.
Las deducciones por producciones cinematográficas son uno de los mejores productos financieros que existen. ¿Sabes por qué tienen una rentabilidad garantizada del 20%?
Este tipo de deducciones llegan a ser de hasta el 20-30% de los costes de producción, y muchas veces (muchísimas) quedan desaprovechadas por falta de ingresos suficientes (hacer una pelicula no es rentable).
Imaginate que una productora de cine tiene gastos de 500.000€, este gasto le da derecho a una deducción de 100.000€. Pero si la productora ha ingresado 500.000 €, el resultado es 0€ y no puede aplicar la deducción a la que tiene derecho (500.000€ gastos – 500.000€ ingresos = 0€). ¿Qué puede hacer la productora?
Puede vender la deducción de 100.000€ a cambio de recibir 83.333€ (rentabilidad del 20%). Así, la productora recibe 83.333€ de ingresos extra. Esta estrategia de compra-venta de deducciones se puede hacer con el límite del 20% de rentabilidad.
De esta manera ganan ambos, la productora termina el año en beneficios, y el inversor gana 16.667 euros para reducir su carga impositiva.
¿Qué son las bonificaciones en el Impuesto de Sociedades?
Las bonificaciones son reducciones que se aplican directamente sobre la cuota íntegra del Impuesto de Sociedades.
A diferencia de las deducciones, que afectan la base imponible, las bonificaciones disminuyen la cantidad de impuestos a pagar después de aplicar el tipo impositivo.
Algunas bonificaciones fiscales en el impuesto de sociedades destacadas incluyen:
- Bonificación por rentas obtenidas en Ceuta y Melilla: Las empresas que obtengan rentas en estas ciudades autónomas pueden beneficiarse de una bonificación del 50% en la cuota del Impuesto de Sociedades.
- Bonificación para cooperativas especialmente protegidas: Estas entidades pueden disfrutar de una bonificación del 50% en la cuota correspondiente a sus resultados.
- Bonificación del 85% para la cuota íntegra de las rentas que derivan del arrendamiento de viviendas cuando se cumplen ciertos requisitos
¿Qué puedo deducir en el Impuesto de Sociedades?
En el Impuesto de Sociedades, puedes deducir gastos que cumplan con los siguientes requisitos.
Deben cumplirse los tres y en algunos casos especiales alguno más:
- Están vinculados a la actividad económica de la empresa.
- Están debidamente justificados mediante facturas, recibos o documentos similares.
- Están registrados contablemente en los libros de la empresa.
Algunos ejemplos de gastos deducibles de este tipo son:
- Gastos directamente relacionados con la actividad económica: incluyen gastos como alquileres, suministros, gastos de personal, publicidad y promoción, y cualquier otro gasto necesario para el desarrollo de la actividad de la empresa.
- Inversiones: se aplican a ciertas inversiones realizadas por la empresa, como la adquisición de bienes de equipo, activos intangibles o inversiones en I+D+i (Investigación, Desarrollo e Innovación Tecnológica).
- Gastos de formación profesional: se refieren a los gastos realizados en la capacitación y formación de los empleados de la empresa.
- Conservación y mejora del medio ambiente: incluyen las inversiones y gastos realizados para mejorar el impacto medioambiental de la empresa.
- Inversión en edición de libros, producciones cinematográficas y Bienes de Interés Cultural.
- Creación de empleo y para trabajadores con discapacidad: deducciones que se aplican cuando la empresa contrata a personas con discapacidad o crea nuevos empleos que cumplen ciertos requisitos.
¿Dónde y cuándo se aplican las deducciones y bonificaciones en el impuesto de sociedades?
Las deducciones y bonificaciones se aplican al calcular y presentar el Impuesto de Sociedades mediante los modelos 200 y 202.
Las empresas deben asegurarse de cumplir con los requisitos establecidos para cada deducción o bonificación y registrar adecuadamente los gastos e inversiones en sus libros contables.
Por lo general, las deducciones y bonificaciones se aplican en el periodo impositivo en el que se devengan los gastos o inversiones, aunque existen algunas excepciones, como la deducción de gastos de facturas atrasadas o provisiones de insolvencias, que pueden aplicarse en períodos impositivos posteriores.
Gastos no deducibles en el Impuesto de Sociedades
Existen también gastos que no pueden deducirse en el Impuesto de Sociedades.
Aquí te presentamos unos ejemplos para que los tengas claro:
- Retribuciones de los fondos propios de la sociedad: Esto incluye reparto de dividendos, fondos de pensiones y primas de asistencia a juntas, entre otros.
- Gastos derivados de la contabilización del Impuesto de Sociedades.
- Multas, sanciones penales y/o administrativas, así como recargos de apremio y recargos extemporáneos de declaraciones, liquidaciones y autoliquidaciones.
- Amortizaciones y provisiones que excedan los límites establecidos legalmente.
- Pérdidas en el juego.
- Donativos y liberalidades, salvo que se trate de gastos de relaciones públicas, personal de la empresa, promoción de bienes y servicios o aquellos que estén correlacionados con los ingresos.
- Gastos derivados de operaciones realizadas en paraísos fiscales.
- Gastos financieros devengados en el periodo impositivo.
Es importante tener en cuenta que este no es un listado exhaustivo de los gastos no deducibles, y siempre es recomendable consultar con un experto en fiscalidad para asegurarse de que se cumplen los requisitos y límites legales.
Conclusión sobre las deducciones en el Impuesto Sociedades
Entender y aprovechar las deducciones y bonificaciones disponibles en el Impuesto de Sociedades es clave para optimizar la carga fiscal y maximizar los beneficios empresariales. Al seguir las pautas proporcionadas en este artículo y contar con la asesoría adecuada, podrás sacar el máximo provecho de estos beneficios fiscales y contribuir al
Hola, soy Isabel, consultora para la tramitación y gestión de subvenciones en FANDIT.